Jornadas realizadas por el Circulo de Orellana, bajo la codirección de Leticia Espinosa de los Monteros y María José Rubio, y en colaboración con la Universidad Rey Juan Carlos en sus Cursos de Verano del 2023.
Durante la I jornada las sesiones se han dedicado a: Sor Constanza de Castilla por Juan Ramon Romero, director del Archivo Histórico Nacional; a Ana de San Bartolomé por la divulgadora cultural Belén Yuste y un encuentro a Santa Teresa de Jesús por el escritor e historiador Jesús Sánchez – Adalid y el letrado del Consejo de Estado y ex ministro José María Michavila
Segunda jornada dedicada: a Sor Patrocinio por el profesor Javier Paredes; Rafaela de Ybarra por la catedrática María Jesús Cava (Universidad de Deusto) ; Dorotea de Chopitea por la historiadora y escritora María José Rubio; la madre Maravillas por el empresario Álvaro Marañón y Bertrán de Lis y la Madre Félix Torres por el Rector José Alberto Parejo.
La historia de España nos sorprende con un amplio elenco de mujeres – algunas muy conocidas, otras muchas por descubrir y valorar-, que desde su opción por la vida contemplativa, fueron pioneras, fundadoras y promotoras de nuevos edificios, nuevas órdenes o nuevas misiones de carácter religioso, cultural y social. La mística y la Fe fueron su plataforma para demostrar sus talentos intelectuales, su valentía personal y su capacidad de liderazgo.
En una sociedad que durante siglos les cerró el camino del ámbito civil, político, militar -y hasta de la educación-, el religioso fue el único espacio en que pudieron sobresalir como personalidades. Durante la Edad Media buscaron el refugio cultural de los monasterios cistercienses; acompañaron en la Edad Moderna la expansión y globalización de la Monarquía Hispánica, fundando en España y allende los mares; se adaptaron en el siglo XIX a la nueva conciencia y doctrina social, fundando allí donde el Estado no llegaba a educar y cuidar a sus ciudadanos; y llegaron al siglo XX, para seguir fundando en los resquicios que la Modernidad les permite para demostrar que la vida contemplativa y el liderazgo femenino es siempre un valor humano imprescindible en todas las dimensiones de la sociedad